miércoles, 9 de diciembre de 2015

La magia de Disney



Viajar con niños es un rollo, pero los que somos padres estamos dispuestos a hacer un esfuerzo. Un esfuerzo como preparar un viaje a Eurodisney. Sí, la emoción de reencontrarse con la magia te empuja a ello. 

Lo primero, las maletas. Son las maletas del "por si a caso" llueve, hace calor, hace frío... Y con tantos “por si acaso” acabas con un maletorro que no puedes con él y al llegar al lugar siempre recuerdas que algo altamente necesario se ha quedado en casa y no te lo puedes creer. 

Pero estás allí y llega la emoción, el parque, la ilusión de ver a esos personajes que nos y les han robado el corazón, las atracciones, la ambientación....y las colas, las llagas en los pies y el cansancio. Las fotos con Mickey, Minnie, Donald, las ardillas....y los gadgets...acabas comprando las cosas más incomprensibles e innecesarias pero todo en forma de  orejas del más famoso de los ratones. 

Acabas el día con los pies destrozados, unas orejas de Minnie en la cabeza, la mochila a tope de imanes, llaveros, sudaderas, calzoncillos, tazas y tacitas, con dolor de estómago y pensando que cuando vuelvas te vas a alimentar de ensaladas, pero cuando miras a los peques durmiendo, reventados sin haber sido capaces de cenar, se dibuja una gran sonrisa en tus labios. Un recuerdo inolvidable en familia que nadie debería perderse: ¡vivir la magia de Disney! 


No hay comentarios:

Publicar un comentario